Tipos de Renta Variable
La renta variable incluye instrumentos financieros cuyo valor y rendimiento dependen de cómo les va a las empresas o al mercado en general. No hay garantías de cuánto puedes ganar o perder, ya que todo está relacionado con el desempeño del activo. A continuación, algunos ejemplos comunes:
Las acciones son lo primero que viene a la mente cuando hablamos de renta variable. Comprar una acción significa que eres dueño de una pequeña parte de una empresa. Hay acciones "ordinarias", que te pueden dar derecho a voto en las decisiones de la empresa y a recibir dividendos (una parte de las ganancias), y acciones "preferentes", que no te dejan votar pero te dan prioridad para recibir pagos.
Otro ejemplo muy popular son los ETFs. Estos son fondos que se pueden comprar y vender como si fueran acciones, pero están diseñados para seguir el rendimiento de cosas más grandes, como un grupo de empresas, un sector específico (como tecnología) o incluso el precio del oro. Son una forma fácil de diversificar tu inversión.
También están los fondos de inversión en renta variable, que funcionan de manera similar a los ETFs, pero son gestionados por expertos que eligen en qué acciones invertir. Es una opción para quienes prefieren dejar las decisiones en manos de profesionales.
Si quieres invertir en empresas extranjeras desde tu país, están los ADRs, que son certificados que representan acciones de empresas de otros países pero que cotizan en la bolsa local, como en EE.UU.
Los REITs son otra opción interesante. Estos son vehículos de inversión enfocados en bienes raíces, como edificios de oficinas o apartamentos. Es como invertir en inmuebles pero sin necesidad de comprar una propiedad directamente.
Por último, también hay diferentes categorías de acciones según su tamaño o propósito. Por ejemplo, las acciones de empresas grandes (llamadas large caps) suelen ser más estables, mientras que las de empresas pequeñas (small caps) tienen más potencial de crecimiento pero también más riesgo. Además, algunas acciones son de empresas que están en pleno crecimiento, mientras que otras pertenecen a empresas más maduras y estables.